Más que una trail asfáltica, esta Versys SE resulta a la postre una auténtica moto de carretera con la apariencia y la posición de las maxitrail más confortables que ofrece hoy día el mercado.
La Kawasaki Versys 1000 una moto SUV
Tomando como referencia el mundo del automóvil, en los últimos tiempos vemos una clasificación de motos trail para el asfalto, de trail asfálticas o incluso de motos SUV, al igual que se nombra en el mundo de los coches, para definir de la forma más concisa posible su uso.
Ciertamente, la Kawasaki Versys 1000 SE podría colocarse en esa particular categoría del mercado; pero para ser más exactos sobre qué es lo que ofrece y sobre todo para qué tipo de motorista ha sido diseñada, apuntaremos, como hemos dicho al principio que se trata de toda una moto para la ruta con la colocación tras el manillar de una maxitrail.
Tanto es así, que su idiosincrasia rutera se manifiesta, además y a simple vista, con las 17” de ambas llantas, algo que además facilita sobre manera los cambios de dirección en una moto de esta envergadura. Pero no adelantemos acontecimientos y pasemos a analizar esta soberbia moto, en cualquier caso, punto por punto.
Posición de la Kawasaki Versys 1000
Ya desde el momento en el que la tanteamos en parado, al sentarnos, la posición de esta soberbia tragamillas transmite una sensación de control total, que se reafirma al ponernos en marcha y negociar con desparpajo el giro en la primera plaza, o al tirarnos con confianza sobre uno de esos interminables virajes que nos incorporan a nuestra cotidiana autovía de circunvalación.
El manillar, elevado sobre sus torretas y llamativamente amplio, incluso para una maxitrail, sitúa nuestras manos sobre una línea dominante, además colocarnos los brazos en una postura tan cómoda como natural, tan relajada que resulta ideal para un viaje con largas etapas.
Nuestras posaderas se asientan, por otro lado, en el mismo centro de la moto, lo que nos permite ajustar de una forma precisa el grado de cada inclinada, el impulso de cada balanceo sobre los virajes. Al hablar de los pies, señalar que quedan también sobre el punto medio de esta Versys, para hacer aun más compacta esa sensación de dominio absoluto sobre el volumen, ciertamente considerable que mueve los 250 kilos en vacío que marca sobre la báscula.
Cómo se comporta la Versys 1000
Suavidad es sin duda la palabra que encierra casi todo el conjunto de sensaciones que nos transmite esta gran moto sobre la carretera. Efectivamente, una suavidad que no solo sentimos con el tacto eléctrico de un motor que borra de nuestro vocabulario motero la palabra “Vibraciones”, sino que también nos transmite una entrega predecible y gradual de sus 120 CV, sea cual sea el modo de conducción que elijamos en el menú electrónico, dentro de la peculiaridad con que se muestra cada uno de ellos.
De otro lado, el empuje del tetracilíndrico se siente desde muy abajo tan poderoso (102 Nm a 7.500) como la fuerza de un remolcador. De hecho, su cubicaje (1.043 cc) puede darnos la impresión de un motor más grande, como el 1400 que equipó hasta hace poco las Kawasaki super sport y de gran turismo.
Pero esa suavidad que se percibe en el tacto del acelerador y la respuesta del motor se extiende también al cambio, ofreciendo una precisión en el pie que resulta un verdadero placer, al igual que el embrague, transmitiendo en la maneta una blanda sensación al tirar de ella con los dedos.
Protección
La Versys 1000SE equipa una pantalla regulable en altura mediante dos palomillas de plástico situadas en los laterales. En su altura máxima alcanza a cubrir a un servidor (1,91 m) hasta la frente. Pero además ello, sobre esa línea, abre la máxima extensión de su forma (un trapecio invertido), dando como resultado una mayor protección por encima del pecho, y si el motorista nos es de una talla particularmente ancha, puede cubrir parte de sus hombros.
Abajo, las piernas, quedan con los muslos resguardados al completo por las solapas superiores que marca la ergonomía del depósito, con sus 21 litros de capacidad.
En cuanto a las manos, quedan totalmente a cubierto por unos robustos protectores (con los kits Tourer y Grand Tourer), que no solo las resguardarán del frío, sino también del impacto que provocan los insectos o las gotas aceradas del aguanieve.
La frenada de la Versys 1000SE
Las pinzas monoblock radiales, los dos discos de 310 mm, y la bomba también radial, ofrecen una efectividad a la hora de parar que queda en la línea del motor; siendo progresiva a cada milímetro, para mostrarse con contundencia en el último apretón, cuando exigimos toda su capacidar para detener en un breve espacio el cuarto de tonelada esta maxitrail.
En lo que respecta al tren posterior, el disco de 250 mm tira del conjunto de forma eficaz para mantener la moto lo más horizontal posible mientras se detiene.
Por si esto resultara poco seguro y no transmitiera aún toda la confianza al motorista, la Versys 1000 SE viene equipada con la asistencia del sistema KCMF (Kawasaki Cornering Magnamente Funtion); es decir: la versión Kawa del “ABS en curva”. El KCMF hace un cálculo constante de la presión máxima que podemos aplicar sobre la maneta durante el paso por curva, en cada momento del viraje, tomando el dato del ángulo de inclinación que le transmite la IMU de la marca BOSCH.
De Noche con la Kawa Versys 1000
Este mismo parámetro, el del ángulo de inclinación, también se aprovecha en la noche. A la iluminación de lujo que ya ofrece el grupo óptico frontal, se suma en cada lado de la moto una hilera con tres luces led que se encienden progresivamente con la inclinada que vamos haciendo.
Y por si esto fuera poco, el kit Grand Tourer para esta Versys 1000SE añade, además, dos faros antiniebla colocados, como es natural, en la línea más baja de la moto, por lo que nos pueden servir también como unos prácticos «cuneteros», ampliando el haz de luz total que proyecta la moto. En definitiva: una moto rutera nocturna como pocas en el mercado.
El Pasajero
Lo cierto es que nuestro acompañante se va a sentir sobre la Versys 1000 SE poco menos que como un ministro en moto. El asiento, de generosa amplitud, se percibe mullido en la primera sensación, pero es lo mínimo para tener una impresión confortable en el momento de sentarte, porque después, con el paso del tiempo y de los kilómetros, se muestra con la firmeza hace falta para que nuestras posaderas y nuestros riñones no se quejen durante un largo viaje.
Por otro lado, el contorno de la plaza trasera que delimitada por dos asas de notable solidez y amplitud, garantizando un buen agarre para nuestro pasajero. Y para completar este pack de confort dedicado a la segunda plaza, las estriberas se muestran con una generosa goma, para dejar las piernas con una postura perfecta para la gran travesía, guardando una suficiente distancia con el contorno de las maletas laterales.
Apuntaremos, además, que Kawasaki ofrece un asiento aparte, diferente, diseñado para motoristas de menor talla, rebajando la altura estándar de 840 mm.
Modos de conducción para la Versys 1000
Si atendemos a la entrega, predecible y medida, que ha diseñado Kawasaki para la curva de los 120 CV que rinde este tretacilíndrico, veremos al instante que encaja con la esencia, claramente rutera, que lleva dentro y expone al exterior esta Versys 1000 SE. Por tanto, no tendría mucho sentido diseñar uno de sus modos electrónicos para que la moto saliera embravecida al momento de remangar el puño, por muy deportivo que llamaran a ese modo.
De esa manera, tanto en la función Sport como en la Street, esta maxitrail resulta igualmente manejable contando ya con una experiencia de base como motorista. Junto a esas dos versiones del motor, encontramos el modo Rain, que por si imprimiera poco control, recorta la potencia hasta los 75 CV, si bien es verdad que esta rebaja solo se haga necesaria para despistados, o condiciones extremas del firme, gracias a la medida milimétrica con la que podemos graduar la potencia al giro del puño, y por encima de ello, gracias a la posición de control que ofrece esta Versys detrás de su manillar.
Aparte de estas tres opciones electrónicas, Kawasaki nos brinda con el modo “Manual” la oportunidad de programar a nuestro gusto y estilo todos los parámetros de esta Verys 1000SE.
Por último en este apartado, la diversidad electrónica de esta súper rutera se muestra como un auténtico escaparate a través de la pantalla TFT (antes LCD) con todo su organigrama digital.
Gracias a este pequeño vídeo wold, podemos supervisar y regular una surtida variedad de parámetros, como la regulación de la suspensión trasera en sus tres medidas, la precarga de la horquilla, los puños calefactables, el control de crucero, los niveles del control de tracción, y sumado a ellos, detalles tan sofisticados como el ángulo máximo de inclinación.
La Verys 1000 fuera de la carretera
No vamos a dejar de subrayar que esta maxitrail de Kawasaki es una moto de carretera, prácticamente al cien por cien. Detalles como la colocación más bien baja del motor, con los cuatro colectores expuestos a cualquier impacto, justo detrás de la rueda delantera, dejan fuera del sentido común cualquier impulso off road, más allá de lo que diera de sí cualquier naked, como la propia Z900 u otra moto de carretera.
De todos modos, su posición de control absoluto y además, una cierta facilidad que ofrece la posición de las estriberas para conducir puestos en pie, nos permiten hacer un trayecto a lo largo de un camino bien asentado, aunque no esté asfaltado, uno de tantos que sirven de acceso a los cultivos, a la hostelería rural o a la arquitectura románica.
Eso sí, si cupiera en nuestro tipo de uso hacer estas incursiones con alguna frecuencia, nos convendría montar unos neumáticos de tipo mixto 90/10 o incluso 80/20, que cuentan con un diseño eminentemente rutero, con la peculiaridad de que utilizan compuestos de goma y resistentes a los cortes que provocarían en una cubierta de carretera pura los filos y las aristas de la grava y los guijarros esparcidos por los caminos.
Mejorable en la Versys 1000
En una moto tan voluminosa, que no resulta precisamente ligera, más aun con una potente previsión de carga, cabe esperar un caballete lateral y un mecanismo que se muestren algo más sólidos, al menos en apariencia.
Por el contra, el caballete central coloca la moto en una posición bien asentada sobre la vertical, facilitando además la elevación de todo el peso, cuando cargamos nuestra fuerza sobre el pedal al uso para esta maniobra, que resulta ciertamente más complicada en otros modelos de la categoría.
Precio de la Kawasaki Versys 1000
La versión SE, con el Kit Gran Tourer que protagoniza este reportaje, tiene un precio de 18.481 euros.
Este kit se compone del conjunto de maletas, más los faros antiniebla, los protectores para las manos, protector del motor, toma de 12 Voltios y otros elementos más que hacen más llevadero aun nuestro viaje.
La Versys 1000SE con el kit Tourer (igual que el Grand, sin maletas / alforjas) es de 17.999 euros.
Además, Kawasaki ofrece también en su catálogo una Versys 1000 básica por un precio de 14.425 euros, que, como es de esperar, no cuenta con la variedad electrónica de la SE ni con un equipamiento tan exuberante, cambiando también la pantalla de información por otra menos sofisticada, aunque no por ello menos práctica.
Sobre estos precios, la marca nipona hace ofertas diversas, como la matriculación o el seguro gratis, dependiendo del caso.
Nuestra opinión sobre la Kawasaki Versys 1000 SE
Una auténtica gran turismo, con manillar ancho y formato maxitrail, que ofrece el confort de la mejor moto viajera, como era la Kawasaki GTR 1400, colocándonos en una posición de control que también nos invita a disfrutar por nuestra carretera de montaña favorita, o por esa ruta fantástica que serpentea junto por los recortes de un acantilado. Pero más allá de ello, esta súper Kawa nos puede llevar con una más que honrosa seguridad a lo largo de algún camino de firme regular, aunque su textura sea arenosa.
Una moto, en cualquier caso, francamente fácil de conducir, a pesar de lo que puedan imponer sus dimensiones, que además se presenta como una de las mejores del mercado para viajar a dúo.
Por último, la Versys 1000, en su versión SE, se propone en el catálogo de Kawasaki como su Gran Turismo actual para afrontar ese gran viaje soñado, bien sea solo o en compañía. En definitiva, una moto viajera, que propone como atributos más sólidos su confort y el control absoluto al conducirla en cualquier circunstancia.
Preguntas recurrentes sobre la Versys 1000SE
⭐ ¿Cuánto cuesta la edición 2020 de la Versys 1000SE?
El modelo 2020 18.481 €
⭐ ¿Kawasaki Versys 1000SE consumo?
Esto siempre va a depender de tu conducción pero hemos registrado unos resultados entre los 5,4 y los 5,6 litros a los 100.
⭐ Kawasaki Versys 1000SE lanzamiento
Fecha de lanzamiento Enero de 2020
⭐ Kawasaki Versys 1000SE versiones
Esta disponible en las versiones Tourer, Gran Tourer y Special Edition.
Otras pruebas de Maxitrails
Muy buena prueba, a mi me encanta esa moto, esta muy pensada como comentas para viajar por buenas y curvadas carreteras, en mi opinión, al igual que la tracer 09, aunque menos cómoda tanto para piloto como copiloto.
Yo tengo la Versys 1000 SE 2021, vengo de una Yamaha Tracer 900 la cual es una excelente moto, pero la Kawasaki es otro nivel, es difícil encontrar otra moto con la comodidad, la suavidad y el poder de su motor. Antes de comprarla hice la prueba de la BMW 1000 XR, y honestamente, no me agradó, es todo lo contrario, más deportiva por lo tanto no tan cómoda, emana muchísimo calor del motor y no tiene los bajos de la Kawasaki. La Versys 1000 SE es una moto sumamente recomendable, una verdadera delicia!