Hace tiempo asistí a la presentación a la prensa de un scooter con tres ruedas. Durante el acto nos descubrieron unas cifras de ventas, asombrosas, en una ciudad como París. Más de 12.000 unidades vendidas, en aquel entonces, en un solo año. Y uno se quedó en aquel momento preguntando cómo es posible que se vendieran tantísimas motos de tres ruedas en una sola ciudad, por muy cosmopolita que resultase.
Bastó hacer un pequeño esfuerzo de imaginación y de memoria, para situarse sobre La Ciudad de la Luz y recordar que el pavimento de todo su casco histórico, tan extenso como monumental, está construido sobre una base de adoquines. Si a ese peculiar detalle le añadimos las humedades y frecuentes nieblas que crea el río Sena, no nos costará entender cómo los parisinos pueden apreciar tanto el apoyo de dos ruedas delanteras en sus scooter sobre un piso tan resbaladizo.
Mejores Tres Scooter de tres ruedas
Hemos seleccionado tres modelos que pueden exponerse como los más representativos de este particular segmento, que crece más y más cada día.
Son modelos que repiten algunas características generales, tales como el ángulo de inclinación máximo fijado en los 45º, una auténtica barbaridad para tumbar en la calle; así como la consideración de triciclo por las homologaciones españolas, algo que habilita únicamente a los conductores con carné B de coche, dejando fuera a los motoristas que tan solo poseen un permiso del tipo A.
Con contramanillar
Aparte de estas dos características, la principal y más definitoria de esos vehículos con tres ruedas es que ofrecen un comportamiento idéntico al de cualquier moto, o cualquier scooter de dos ruedas. Son modelos que se inclinan para tomar las curvas, y lo hacen además con la necesidad de aplicar el conocido contramanillar.
Por añadido, su estabilidad sobre sus tres ruedas no constituye un bloque estático, sino que su comportamiento inclinando en el paso por curva, o en cualquier otra circunstancia, se hace siempre en equilibrio y con el riesgo de caída, exactamente igual que nos ocurriría con una moto de dos ruedas.
En general, el comportamiento dinámico es idéntico al de las dos ruedas, y sólo apreciaremos una cuestión de matices en el apoyo delantero, así como en cierta ralentización tanto a la hora de ejecutar los cambios de dirección, como a la de girar para entrar en cualquier viraje.
¿Qué ocurre más allá del límite?
En una de nuestras pruebas, forzamos la inclinada, dentro de nuestro escenario habitual de trabajo, y comprobamos sus efectos. Al sobrepasar los 45º de inclinación, la moto o el scooter, se apoya sólo sobre la rueda exterior, y comienza entonces a transitar sobre un insólito equilibrio en diagonal, con la rueda interior en el aire, y la delantera exterior junto con la trasera soportando el peso del conjunto sobre el asfalto, yendo completamente inclinado.
En cualquier caso, la tumbada queda fuera de lo racional y desde luego se trata de un experimento tan sólo para ilustrar este artículo, y que nunca puede ser recomendable para practicar en cualquier circunstancia, por muy favorable que ésta se presente.
Piaggio MP3 500 LT Bussines
Un scooter con toda la comodidad y el equipamiento de una auténtica GT, con una potencia de 39 CV, suficiente para moverse con soltura, a pesar del rozamiento que crean sus tres ruedas.
El sistema de barras y rótulas diseñado por Piaggio para permitir la basculación de su MP3 500 LT Bussines resulta llamativamente rápido en los cambios de dirección. Bien es verdad que debes de darle su tiempo, si llegas directamente del mundo de las dos ruedas, pero, aun así, resulta llamativamente ágil para todo lo que tiene que mover.
El bloqueo del sistema de basculación que permite en las paradas, no solo resulta una comodidad añadida, sino que puede resultar mucho más práctico de lo que aparenta en un principio.
No en vano, en cierta ocasión llegué bajo un aguacero a la línea de un semáforo, entre los coches, y justo en el momento de detenerme, me percaté de que no me quedaba más remedio que hacerlo sobre un charco de varios centímetros de profundidad. Con este sistema de bloqueo, me ahorré bajar un pie para meterlo en el charco y sujetar así el conjunto del MP3.
El precio de este scooter GT es de 8.649 euros.
Yamaha Tricity 125
Es el más pequeño de la selección que hemos hecho, si bien es verdad que monta dos ruedas delanteras de 14”, por las 13 que mide el diámetro de la trasera. Se soporta sobre un chasis tubular, y el tren delantero que confeccionado a base de un conjunto de paralelogramos, con dos horquillas telescópicas convencionales.
La frenada está garantizada por un sistema combinado sobre los dos discos delanteros de 220 mm y el trasero de 230.
El motor es un monocilíndrico de 125 cc exactos y refrigeración líquida; y el precio de este Tricity 125 está cifrado en 3.999 euros.
Yamaha Niken
Es la primera en su categoría. Una verdadera moto con tres ruedas, que toma como base la Yamaha Tracer Mt-09 y monta sobre ella dos horquillas invertidas, con dos ruedas delanteras de 17 pulgadas.
Su capacidad de frenada, en casi cualquier circunstancia, es como para haber verdaderas barbaridades, desde el punto de vista tradicional de las dos ruedas y sin necesitar latiquillos metalicos o palancas de freno diferentes a las de serie. La confianza que ofrece tumbando resulta insólita, tanto es así, que el efecto de derrape provocado en la rueda trasera, y que se produce con relativa facilidad, resulta muy sencillo de controlar casi para cualquiera, incluso sin tener experiencia off road sobre una moto.
Una moto sorprendente, una apuesta audaz de Yamaha para ofrecer en el mercado un modelo único hasta ahora en su categoría, por un precio que parte desde los 16.349 euros.
El Quadro en discordia
Hemos querido añadir un cuarto protagonista en este artículo protagonizado por el número 3. Aunque, como puede apreciar el lector en las fotografías, monta 4 ruedas, el Quattro de Quadro también está considerado como triciclo por la homologación española, ya que la planta que forma sobre el suelo no es la de un cuadrado regular, sino la de un trapecio, con la vía delantera más ancha que la trasera.
El 4 de Quadro monta su propia estructura de bieletas y rótulas, retenido por un sistema hidráulico, que le da un cierto retardo en las cambios de dirección, si bien es verdad que es perfectamente asimilable para anticiparse con suficiente tiempo, a la hora de negociar rotondas y de doblar esquinas urbanas.
Su motor de 350 le deja con la potencia justa (30 CV) para superar el rozamiento de sus cuatro ruedas, y su comportamiento a la hora de ejecutar tanto los cambios de dirección como la de inclinar es idéntico al de cualquier scooter de tres ruedas. Así mismo, su límite de inclinación está fijado en 45 grados, y su precio en 10.190 euros.