Cómo saber si una moto es robada

Cuando adquirimos una moto de segunda mano, ya sea por Internet o en persona, podemos correr el riesgo de comprar una moto que ha sido robada. Sabemos que suena muy extraño, pero puede llegar a pasar, así que aquí te dejamos toda la información necesaria que te ayudará a identificar si una moto ha sido robada o no.

Lo mejor que podemos hacer para saberlo es acudir a la Jefatura de la Dirección General de Tráfico que nos corresponda, con el fin de solicitar un informe sobre el vehículo. Una vez que tengamos dicho informe, podremos descubrir si el propietario ha dado de baja temporalmente la moto debido a un muy posible extravío. Si sospechamos que una moto ha podido ser robada, llevar a cabo esto es lo más recomendable en un primer momento.

Pasos que debemos seguir

Cuando a alguien le roban la moto, lo más normal es que el propietario de la misma acuda a la Policía Nacional a denunciar el delito. Este paso es obligatorio, al igual que lo que hay que hacer inmediatamente después: ir a la Dirección  General de Tráfico a dar de baja temporal la moto, para evitarnos cualquier tipo de problema.  Este paso, sin embargo, podemos saltárnoslo realmente, ya que la Policía Nacional está comenzando a informar a la DGT automáticamente cuando recibe la denuncia, sin que el usuario se tome la molestia de acudir a hacer esa segunda gestión.

Una forma bastante fiable de saber si una moto es robada o no, es acudir a la Dirección General de Tráfico para pedir un informe sobre el vehículo en cuestión. Con saber el número de matrícula del vehículo es más que suficiente para que nos puedan ayudar. Si resulta que alguien ha denunciado ya el robo de dicha moto, aparecerá indicada la correspondiente baja temporal. Si disponemos de un certificado en formato digital, podemos pedir el llamado certificado de datos de la moto por Internet, sin necesidad de apersonarnos en la Jefatura de la DGT. No obstante, en ambos casos, tendremos que abonar una tasa de algo más de 8 euros.

Las motos, además, cuentan con un número de bastidor, que, básicamente, es un código identificativo único. Para poder saber si una moto es robada o no, a veces basta con comprobar si dicho código, que debe estar impreso en alguna zona del chasis, corresponde con el que está escrito en la documentación original de la moto. Si resulta que no coincide, es evidente que se trata de una moto robada.

El precio de venta también es importante

Otra clara muestra de que estamos ante alguien que nos quiere tratar de vender una moto que ha sido robada, es el precio que pone por ella. De manera general, los productos en venta usados previamente suelen perder un 40 % de su valor de mercado respecto al mismo producto nuevo. Esto es sumamente importante y tenemos que tenerlo siempre en cuenta si queremos comprar una moto usada. Tenemos que ser muy cautos con esto. Por ello, debemos intentar ver el producto antes de efectuar el pago, y por supuesto no hay que olvidarse de pedir la documentación de la moto nada más empezar la negociación.

Con todos estos consejos, ya sabes todo lo que hay que hacer para asegurarte de que la moto de segunda mano que has comprado no haya sido robada. Esperamos, desde MoriwOki, que esta información te haya sido útil. Y recuerda: lo que asegures hoy no hará que te lamentes mañana.

3 preguntas que hacerte para dudar si es robada