Hemos querido traer este modelo, hasta nuestra página motorista, porque nos ha resultado muy interesante la fórmula con la que combina su faceta de transporte diario e interurbano con unas cualidades propias del scooter gran turismo más estirado del mercado. Detalles como las estriberas del pasajero, desplegables con la pulsación de un botón, o como los retrovisores con sus espejos regulables al pivotar sobre sus soportes, representan atributos suficientes para hacer pensar en un estatus GT para este Kymco de 400 cc, más aun cuando nuestro acompañante nos describe con satisfacción la comodidad y el espacio que le ofrece la mullida plaza dispuesta para el pasajero. Lo hemos probado en diferentes escenarios y a lo largo, también, de un viaje con nada menos que 1.300 kilómetros de recorrido.
La posición en parado
Sin embargo, la postura en este Xciting 400, con el trasero claramente adelantado, le presentan como un scooter de conducción netamente urbana, más aun al disponer las manos sobre un manillar que nos brinda un control total sobre el considerable volumen del conjunto, particularmente al girar en maniobras lentas, driblando las trampas que la densidad del tráfico diario nos planta en nuestra trayectoria.
En cuanto a los pies, se mueven a lo largo de ese extenso juego que permite cada plataforma lateral, y que va desde la colocación más deportiva, atrás, hasta la custom cruiser, totalmente adelantados y arriba.
El motor de dos cilindros
El motor se siente lleno y potente, arrancando en cada semáforo, pero después va algo más allá, en una franja intermedia del velocímetro. Simplemente, sorprende con el empuje propio de un motor más grande, o de un motor con dos pistones. Entre los 30 y los 60 por hora, los 37,7 Nm de par máximo que entrega este monocilíndrico resultan demoledores, incluso con pasajero. De esa forma nos catapulta con seguridad, por ejemplo, sobre el carril de acceso a nuestra autovía de circunvalación cotidiana, independientemente de la voracidad que muestre el tráfico más fluido que presente esa mañana.
Luego, la aceleración estira mucho más allá, hasta entregar los 36 CV declarados a 7.500 rpm, con garantías como para hacer un adelantamiento rápido y seguro en cualquier vía de doble sentido, y permitiéndonos escapar, también, de cualquier trampa que nos puedan preparar los tetris que forman los coches sobre la autopista a su velocidad de crucero.
Vibraciones y sonido
En cuanto a las primeras, se perciben las justas para distinguir que vamos sentados sobre un motor de explosión, en lugar de uno eléctrico; algo verdaderamente para valorar en un grado superior a cualquier otro, tratándose de un propulsor monocilíndrico tan grande.
Hablando del sonido, el voluminoso silencioso, cumpliendo con la severidad de la Euro4, se encarga de que el ralentí represente un discreto susurro en este Xciting 400, y su marcha un mero murmullo, rápidamente acallado solo con el ruido que provocan las ruedas de los coches en su paso sobre el pavimento. De hecho, cruzar la ciudad, en medio de la madrugada, representa un verdadero deleite a bordo del Xciting 400, pasando por calles angostas sin que un solo sonido de nuestra marcha escale la fachadas para llamar las ventanas que guardan el descanso de nuestros vecinos.
¿Cuanto gasta?
El consumo resulta francamente contenido en cualquier circunstancia, porque llevamos al Xciting 400 a una situación súper exigente para luchar contra el viento, donde alcanzamos un registro extremo de solo 4,3 litros; por lo que en una conducción mucho más relajada y habitual, podemos contar con una cifra en torno a los tres cada cien kilómetros, que se puede rebajar inclusive, con un coste que podemos rebajar al buscar gasolineras baratas. Ello nos da una autonomía que supera los 400 kms, teniendo en cuenta los 12,5 litros de capacidad con los que cuenta el depósito. Si bien es verdad que el testigo de la reserva aparece con un criterio bastante conservador, que nos permite recorrer un buen tramo antes de encontrar la próxima gasolinera.
Circulando con el Maxiscooter en Ciudad.
No es el más ágil, evidentemente, por su volumen y por su longitud, pero su recortado radio de giro y la contundencia de sus bajos lo hacen particularmente rápido en la calle, lo mismo entre semáforos que sorteando los laberiontos que forma el tráfico para bloquear nuestro paso involuntariamente.
Su caballete central, que se eleva con suma facilidad, representa un seguro extra de estabilidad a la hora de estacionarlo. Lo mismo ocurre cuando queda apoyado sobre el caballete lateral, y accionamos la palanca del freno para el aparcamiento, localizada tras el lado derecho del escudo.
El paso por curva del Xciting 400
El momento de girar llega con la ejecución inmediata y precisa que hacen presagiar tanto la posición de control en la que nos coloca, como las propias llantas de 15” delante y 14 detrás, respectivamente. A continuación, el paso por curva de cualquier scooter a alta velocidad siempre ofrece algún punto de desconfianza, aunque sea tan solo por su disposición geométrica. Para probarlo, llevé el Xciting 400 a un par de curvas habituales para un servidor, que representan un compromiso técnico pasando por ellas con cualquier moto, tanto por su trazado como por su perfil, igual que por los empalmes del puente que soporta, o por una depresión grabada justo en su vértice, en plena bajada y marcando un cambio de rasante.
En el paso por esta particular prueba de fuego, el Xciting 400 se movió, como no podía ser de otra manera, pero lo hizo con nobleza y sin provocar un vaivén, ni mucho menos, que comprometiera su trayectoria. De este modo quedaba patente el difícil equilibrio conseguido por Kymco para unas suspensiones que flutúan entre comodidad general y el aplomo en el paso por curva.
Sensación de los Neumáticos de serie
Nada que reprochar al comportamiento de los Maxxis, que ofrecieron un magnífico rendimiento, puesto a prueba durante las inclinaciones más pronunciadas en seco, así como bajo un fuerte aguacero que nos cayó durante nuestra prueba, mostrando una suficiente capacidad de evacuación en la goma delantera, despejando de agua el camino para que la trasera ejerciera su tracción sin ninguna pérdida apreciable.
Frenada deportiva
Confieso al lector que al caer en el detalle de los dos discos wave de 280 mm y de las pinzas de anclaje radial con firma propia de Kymco, ya no tuve ninguna duda de que la mayor preocupación que tendría en una frenada verdaderamente exigente, al límite, sería la de sujetarme con las piernas, parapetando las rodillas contra el escudo de este Xciting 400.
Lo cierto es que el tacto de la maneta derecha se siente progresivo y preciso al milímetro, tanto apretando con delicadeza para la detención ante un semáforo previsto con tiempo, como la parada al límite ante el peligro de un obstáculo con aparición impredecible.
Con las brillantes prestaciones que desarrolla, bastará en ambos casos con un dedo para detener el scooter, llevando los 108 kilos de un servidor a cuestas, sin contar, por supuesto, con la retención extra que representaría el motor de una moto con cambio de marchas.
El freno trasero se apoya en un disco, también Wave, en este caso de 240 mm con una pinza de la misma firma. Su efectividad retiene los 209 kg declarados de este scooter medio, mucho más allá de la mera función geométrica por la que todo freno trasero mantiene el conjunto lo más paralelo posible al suelo durante la retención.
Aerodinámica de F1
Aparte del innegable atractivo que puedan proyectar sus líneas afiladas, el trabajo aeronáutico de los ingenieros coreanos se deja sentir en marcha sobre dos direcciones bien apreciables.
La primera de ellas es su penetración aerodinámica. En un día de viento fuerza dos, o dos y media –carezco de un criterio marino para medirlo-, y metido en plena autopista, apenas podría apreciar el impacto del viento de frente, mermando el empuje de este Kymco. Tan solo era consciente de él por el ruido que sentía en el casco, debido al potente flujo que lanzaba el deflector que remata la pantalla.
La segunda la aprecié particularmente haciendo el paso por alguna curva en bajada, con profundos cortes del terreno en los flancos que racheaban y cambiaban a capricho la dirección ese mismo viento. Esas circunstancias resultan de lo más comprometidas para un scooter de buen tamaño, como es el Xciting 400, ofreciendo una extensa vela al viento, y sin contar, además con la retención, o la tracción, que aporta el cambio de marchas en una moto.
Preparé todo el cuerpo alerta para compensar con las manos y con las piernas, además del tronco, las terribles sacudidas que esperaba, para que no sacaran el scooter de la trayectoria que le marcaba.
Sin embargo, mantenerlo en la línea, me resultó mucho más asequible de lo que esperaba. No es que fuera fácil, nunca lo es en una situación semejante y yendo a más de 100 por hora, pero sí es cierto que en ninguna de aquellas curvas aprecié que la cosa pudiera complicarse hasta el punto de tener que frenar drásticamente la marcha. Incluso pude apreciarlo al adelantar a un camión por el exterior de la curva, bajo el determinante efecto de su rebufo.
Y es que el labrado sobre la carrocería del Xciting 400, con sus profundas hendiduras laterales, provoca el efecto de dos pequeños alerones, semejante y con todas las distancias, a la carga aerodinámica que crea un Fórmula 1. De ese modo, el frontal del scooter gana un aplomo, extra e inesperado, que afianza al asfalto la trayectoria que le marcamos.
Protección del Kymko ante el viento
Resulta más eficiente de lo que aparenta el morro afilado del Xciting 400, cubriendo el tronco prácticamente al completo, y siempre hablando de un individuo con la corpulencia de quien firma (1,91 m / 108 kg), dejando al descubierto tan sólo los hombros y la parte superior de los brazos. En cuanto a los pies, quedan totalmente a resguardo, lo mismo que las piernas, exceptuando el flanco exterior de las pantorrillas.
Las manos, como suele ser tendencia en la mayoría de estos vehículos, quedan con el frente descubierto.
Cómo alumbra de noche
La luz de cruce proyecta algo así como un ovoide en el centro de nuestra trayectoria y dos intensos reflejos que se extienden alargándose por los laterales, prácticamente a la altura del eje delantero. Estos haces pueden brindar el juego propio de unos faros cuneteros, sin embargo, necesitaremos acostumbrarnos a su compañía, ya que en más de una ocasión podrán sobresaltarnos, confundiendo su reflejo con las luces de un supuesto vehículo que alcanzase nuestra altura por la retaguardia.
La luz de carretera ofrece un buen alcance, si bien es verdad que se echa de menos un punto más de intensidad, tratándose de un scooter de semejante empaque y categoría. No obstante, manteniendo apretado el pulsador de las ráfagas, como si del gatillo de un revólver se tratar, se hace sencillamente de día, sumando ambas luces.
Detalles y Accesorios de la moto
Un scooter como el Xciting 400, con esa pretendida categoría de GT que le hemos asignado, tiene por fuerza que mostrar una lista de detalles que hagan honor a semejante rango. Hacemos a continuación un repaso de su inventario:
Retrovisores
Se aprecian con una factura y un remate prémium, y la extensión que ofrecen sus espejos representa un verdadero lujo en el mundo de las dos ruedas; sin embargo una efectividad, que bien podría resultar única, se ve algo mermada por su situación respecto a nuestros ojos, quedando un punto atrás de la posición ideal y restando con ello una parte de su visibilidad.
Guantera
Discreta y a mano, abre su puerta en el margen izquierdo del escudo, con la capacidad para guardar una billetera más un monedero. Dentro, también, hallaremos una práctica toma de 12 voltios cubierta por su tapa abatible; y junto a esta guantera, sobre la columna de dirección, encontramos además un práctico gancho portaobjetos.
Bajo el asiento
Este hueco se ilumina con una luz de cortesía, y representa un espacio en el que cabe un casco integral de cualquier talla y forma, además de una bolsa de mano, u otros objetos que no ocupen en su conjunto más allá de lo que sería una garrafa de 4 litros.
Señalización
La luz trasera está garantizada con una línea de leds, por lo que seremos divisados con suficiente antelación desde nuestra retaguardia. Lo mismo vale para los indicadores de dirección, que lucen con la misma tecnología.
Información
El cuadro, ofrece una información bastante completa al tratarse de un scooter. Lo preside la esfera de un velocímetro en cuya escala se abre una franja roja a partir de los 120, que representa tan solo una advertencia del límite máximo. En el visor inferior del display, se despliegan las líneas del cuentarrevoluciones y un reloj horario. En el superior, se puede leer la temperatura del líquido refrigerante, las cifras de los consumos, intercambiables con la temperatura ambiente o el voltaje de la batería. Igualmente se alternan los datos que ofrece el ordenador de a bordo.
Para dar una idea de su nitidez, todos estos números se descifran, no sin cierta dificultad, si se sufre una presbicia de dos dioptrías.
¿Qué se puede mejorar?
- Intensidad en la luz de carretera.
- Protección completa de las piernas.
- Recorte en la visión de los retrovisores.
Precio y para quién es el Kymko Xciting 400
Por 5.999 euros, Kymco ofrece un scooter con carrocería y empaque propios de la categoría GT, que se ofrece en el mercado al precio de un modelo medio, con prestaciones sobradas para viajar a cualquier parte, llevando ocupadas las dos plazas y manteniendo un consumo muy contenido. Todo ello, junto con su discreto mantenimiento, lo eleva al rango más competitivo en ese particular segmento del scooter interurbano, para afrontar recorridos cotidianos entre la gran ciudad y la variedad de rincones repartidos por su provincia.
Un modelo ideal para llevarnos de una forma confortable a nuestro, tanto con buen tiempo como en invierno, recorriendo a diario de una forma incansable los kilómetros de autovía que lo separan de nuestro domicilio.
Un scooter que nos ha demostrado, además, sus valiosas capacidades viajeras, por lo que nunca debemos de apartarlo como opción para nuestra escapada de fin de semana, o incluso para una turné vacacional.