El factor caos, la imprevisibilidad de las carreras que le da emoción extra, generó una carrera muy interesante y cargada de información con 5 fábricas distintas en las posiciones de cabeza:
- Enea Bastianini (Ducati)
- Brad Binder (KTM)
- Pol Espargaró (Honda)
- Aleix Espargaró (Aprilia)
- Marc Márquez (Honda)
- Joan Mir (Suzuki)
Lo que a su vez ha generado mucha expectativa e interrogantes para la segunda carrera de la temporada, dada la disparidad del mundial y que las predicciones parecen haberse quedado como habladurías sin fundamento.
La «hecatombe» de Ducati
Aunque bien es cierto que la jornada se cerró con la victoria de un Enea Bastianini en un sentido homenaje real y simbólico a Fausto Gressini, y que nunca había ganado una carrera en MotoGP, no fue el equipo de fábrica sino el Gresini Racing MotoGP el que se llevó dicha victoria.

Mientras, Bagnaia se cayó llevándose por delante a Jorge Martín y Jack Miller tuvo que abandonar por problemas técnicos en la moto. Todo ello suscitó la pregunta de ¿qué les ha pasado a las prometedoras Ducati en un circuito que históricamente les favorece?
Bagnaia reveló que, de forma inesperada y en el ultimo momento, justo antes de congelar motores, decidió cambiar de estrategia y quedarse con el motor de la GP2021, obligando a su compañero Jack Miller a llevar el mismo, dado que ambos están en el equipo oficial.
El Pramac sí lleva la GP2022 pero a Pecco parece no convencerle la agresividad de la nueva moto, y prefiere la suavidad de entrega del anterior motor. Aún así en los entrenos del gran premio, ambas Ducati han estado en posiciones retrasadas.
Marc Márquez no fue protagonista de Honda
La Honda de Pol Espargaró no solo fue mas rápida sino que se encontró ante una situación inesperada para él, ya que se vio liderando la carrera desde el principio, y aunque esa no era su estrategia inicial, decidió tirar todo lo que dio de si el neumático, generando una carrera 11 segundos más rápida que la del año pasado.
Marc Márquez, es honesto y no se esconde: con esa moto, ese setup, y ese estilo de pilotaje, la moto había llegado a su límite y no daba más de él. Decidió defender la posición en vez de cometer errores.

Cuando Marc actúa con su inteligencia habitual prueba los límites en los entrenos, para no asumir riesgos en carrera, pero estaba ante un circuito en el que sufre habitualmente y sin buena gestión con la caída del neumático.
Aprilia, la moto más rápida de todos
Aleix fue el piloto más rápido tanto en velocidad punta (en algunas vueltas y batiendo el record de 352 km/h) como en tiempo por vuelta, sacándole unos cuantos km/h de distancia a los más rápidos.
Su novena vuelta fue la más rápida en medio de una batalla infernal contra Márquez y Mir, que le frenó a la hora de escalar posiciones. Por un lado, estuvo demasiadas vueltas detrás de Mir, que iba perdiendo terreno poco a poco.
Por otro lado, le costó adelantar a Marc porque frena muy tarde y porque la Honda acelera fuerte. También por el respeto que les tiene a ambos pilotos sobre los que calcula que perdió un segundo con cada uno y que le dejó a poco más de 2 segundos del ganador.
Aleix, hace un año y medio y con aquella moto ineficiente, jamás se hubiese imaginado las gestas que está consiguiendo, lo cual abre una pequeña incógnita: ¿qué está pasando con su compañero Maverick Viñales entonces?
Las desaparecidas Suzuki
Inexplicablemente una de las decepciones del gran premio fueron las Suzuki que no llegaron a las expectativas que prometían en los entrenamientos. Tanto Rins como Mir mostraban un ritmo consistente pero no fue suficiente para subirles al podio.
La cuestión del neumático
Un factor importante parece que fue la elección del neumático. El medio, que es el blando del año pasado, y que fue el que eligió Enea en su rueda trasera, así que como Binder en ambas ruedas, puedo haber sido clave para los puestos de cabeza.